
Tengo unos dias corriendo en las noches, si no lo han hecho les digo es buenísimo, nadie te molesta, escuchas musiquita, botas la chela del fin de semana y botas toxinas en cantidad (la otra opción es sexo, pero en vacas flacas).
Antes lo hacía todos los días al menos una hora de lunes a domingo, era super porque dió resultados, la ropa me quedaba mejor, ya no quería pegarle a nadie, ya no me la pegaba tan jodido y me sentía mucho mejor. No recuerdo porque deje de hacerlo a diario pero ahora lo haré nuevamente.
Corro en un parque cerca a casa, es un circuito ovalado, a ratos me siento como un hamster en una rueda pero de sudar sudo harto... ayer corría con un buen amigo y le decía que no hay como correr hasta que te duele el bazo, por cierto, hace cuanto no corren hasta que les duele el bazo?
Cuando empecé a correr hace dos, en la mñanas me encontraba con una peculiar fauna de runners, había desde los señores entrados en años dando una dura pelea contra la wata chelera, las señoras que no corren sino caminan a punta de chismes, el pisado que saca al perrito, el señor que usaba el mismo polo todos los días, el papá y la hijita con buen futuro, y una pareja de personajes a los cuales odié los primeros 3 meses, dos personas de edad de unos sesentaipico de años, me sentía como ellos como un volocho en carretera al cual pasaba un Yaris nuevito (ñannnnnnn, ñannnnnn); me refiero a que trotaba despacio para no cansarme y estos señores pasaban a mi lado hechos una bala. Y sí, al pasar podía distinguir la sonrisa burlona (tipo boca chueca). Así que día tras día de lunes a domingo corría cada vez mas rápido para que los viejitos runners no me pasaran. Y fue duro, corría y corría hasta que de pronto mis 26 años vencieron a los sexagenarios. De pronto me di cuenta que corría casi una hora sin parar, esos viejitos me hicieron ganar resistencia. ¿Qué será de ellos? Seguirán corriendo...
Asi que si sales a correr, y sientes que alguien viene atrás a velocidad y distingues que es un viejito Coca Cola, caballero arrimate a un lado, y métele ganas, vas a ver que poco a poco le vas a comenzar a pisar los talones y de ahí ni te van a alcanzar.
Además esos viejitos depués se meten su Coca Cola y pierden físico.
Espero que esos dos señores de edad sigan corriendo y animando a otros nuevos runners como yo a enfrentar duras batallas contra la cerveza, el tallarín saltado, el arroz graneado, las papas fritas, las siestas luego del almuerzo, la gaseosa helada y la repetición.
Corre hasta sudar el mentón...
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